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Blanco y Negro

“La vida es a colores, pero el blanco y negro es más realista”, decían en una película ochentera de Win Wenders. Anita Ekberg gritando “Marcelo, come here!” mientras se remojaba en la Fontana de Trevi, Bogart con un cigarro en los labios y una cerilla en la mano, Chaplin recitando un discurso memorable, el Guernica, el beso de Times Square, los obreros almorzando en un andamio en lo alto del Rockefeller Center, las imágenes en blanco y negro ganan clase y humanidad. Son eternas. Evocan misterios y nostalgias. Jamás pasan de moda. Los monjes cistercienses del siglo XII pensaban que la pintura en blanco y negro eliminaba las distracciones y focalizaba el interés en lo espiritual. La ausencia de tonalidades nos hace apreciar matices que el color esconde. El humo, la niebla, el mar, las arrugas, un cuerpo, los besos, todo es más bello en monocromo.

Cuadros y láminas decorativas con diseños en blanco y negro

Los pintores, dicen los historiadores, restringían el uso del color cuando querían demostrar la superioridad de la pintura sobre otras artes. Al artista no le queda otro remedio que jugar con las formas, las estructuras, las luces y los volúmenes para trasmitir sensaciones. El resultado es más puro, más inspirador. ¿Nos dirían lo mismo las fotografías de Robert Capa (no vamos a entrar aquí en si son o no de él o si el tal Robert existió) si detrás de sus soldados apareciera un luminoso y brillante cielo despejado? Decididamente, no. Para demostrar que estamos en lo cierto, en Stendio encontrarás una amplísima variedad de cuadros y láminas decorativas en blanco y negro. Ilustraciones, motivos naturales, fotografías, diseños abstractos… imágenes y composiciones cargadas de fuerza y significado que llenarán la estancia con su poderoso encanto. Atemporal, sofisticado y sencillo, si los mejores artistas llevan apostando por el blanco y negro siglos, será por algo. Desde el Renacimiento hasta el arte contemporáneo, si fue con todas las épocas irá con tu mobiliario.

Arte en blanco y negro para tus paredes

El arte en blanco y negro impacta sobre nuestros sentidos. Sugiere, evoca, aguanta mejor el paso del tiempo y, por supuesto, decora. Poco importa que tu sofá sea verde o tus paredes tan rojas como el fuego, las láminas monocromo en blanco y negro combinan con todo y ofrecen la posibilidad de crear composiciones con otros cuadros de distintas tonalidades. Con frecuencia, asimilamos que las láminas y cuadros en blanco y negro son exclusivamente para ambientes minimalistas. ¿Por qué? ¿Son minimalistas Las Meninas de Picasso o la famosa fotografía de Marilyn posando con un gato? Crea contrastes y busca el equilibrio. La paleta bicolor admite cualquier puesta en escena y a la hora de vestir un ambiente puedes apostar por cuadros monocromo y muebles rústicos, modernos o industriales. Puede ser cálido y acogedor. ¿Quién no ha querido pasear por el Nueva York en blanco y negro de Sinatra o recorrer en vespa la Roma de Audrey Hepburn y Gregory Peck? Tú pones el estilo y nosotros el arte. ¿Trato hecho?

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